Indiscutible fue la cercanía que tuvieron los ciudadanos de nuestro país y especialmente de Santiago con el General Baquedano, escultura en hierro de Virginio Arias que diseñó la representación del General junto a su caballo Diamante, para honrar a todos los caídos en la Guerra del Pacífico.
Sin imaginarlo, el General Baquedano fue partícipe de los festejos de todo un país, ubicado en la explanada más abierta del límite entre las comunas de Providencia y Santiago. Sin embargo, desde el 18 de octubre de 2019 los festejos se transformaron en reclamos y descontento, donde cada golpe, lengua de fuego y rallado impregnó la escultura, descargando frustraciones. Como si cada una de las acciones que ejercían en él pudieran traspasar a quienes consideraban responsables de sus desgracias, lo que motivó el retiro de escultura.
Tuvieron que pasar tres años para que en un nuevo octubre se iniciaran las obras de cierre perimetral con el objetivo de remodelar la Plaza Baquedano, Italia o de La Dignidad, dándole la oportunidad de cambiar su aspecto y resignificarla, gracias a la inversión de 3,4 millones de dólares que aportará la comuna de Providencia. Sin duda, un desafío importante para la conservación del patrimonio, ya que es un lugar cuya mayor carga es inmaterial y su conservación no dependerá solo de los esfuerzos y voluntad del municipio, sino también de los vecinos, transeúntes y eventuales manifestantes. Lo que queda por conocer es el nombre con el cual será rebautizada.